¿Por qué el nombre de Liberación 2000?
Muchas personas me han preguntado el porqué del nombre que tiene la empresa y otros muchos creen saber a qué es debido. Pero, la verdad es mucha más sencilla de lo que se piensa.
Cuando empezamos en Nacex, no se empezó con una sociedad S.L., se puso a nombre de una persona física, exactamente a nombre de mi marido en aquellos momentos, que hoy en día, es el padre de mi hija y compañero Nacex. En otro momento, hablaré de cómo se puede tener una separación matrimonial y seguir trabajando juntos por una empresa. Veréis que es una historia muy divertida y sobre todo original.
Pero llegado un momento, era conveniente crear una sociedad limitada. Conveniente o justo, porque ya se podría declarar a todos los socios que estaban trabajando para levantar la empresa y, se tenía que reconocer el trabajo mío concretamente. Porque la tercera socia era mi hija, que la pobre sufría las ausencias de sus progenitores o nos acompañaba en la nave para que estuviera con nosotros.
Como todo el mundo sabe, para crear una sociedad limitada, aparte de tener un dinero hay que buscar un nombre y aquí es cuando empieza el dolor de cabeza. ¿Qué nombre ponemos? Se hacen pruebas con trozos de los nombres, de los apellidos, etc., intentando que todos los miembros tengan las iniciales o algo dentro de la frase. También se intentan buscar frases relacionadas con el trabajo que realizamos: paquete, Courier, nacional, etc., Al final, nos damos cuenta que no somos muy originales.
En el Registro Central hay que presentar la solicitud de la denominación de la empresa, pero para esto hay que pensar en 5 nombres diferentes. Por lo tanto, hay que darle a la cabeza para ver lo que durante años será tú identificación.
Después de pensar y pensar, añadimos la calle donde vivíamos en esos momentos y actualmente es donde yo sigo viviendo. ¿Y cómo se llama la calle? Pues Liberación. Así de sencillo.
El 2000 está claro porque se añadió. Quedaban unos años para llegar a esa mágica fecha y estábamos sufriendo el “efecto 2000” con la informática. Todos como histéricos cambiando de programas. Nosotros pasamos del Gesagen al Gesnac. Todos los días, oíamos que el 31-12-1999 con las últimas campanadas de la Nochevieja, el mundo se iba a parar, no tendríamos ordenadores, los aviones no tendrían aparatos de navegación y caerían, las tarjetas de crédito no funcionarían, etc., etc. Total, que el mundo iba a dejar de girar alrededor del sol porque a los informáticos se les olvidó tener en cuenta el cambio de centuria.
Pues nosotros, ni calvos ni perezosos, siempre con el ánimo de “al mal tiempo buena cara”, dijimos: si en el año 2000 todo se iba a estropear, lo ponemos en el nombre, seguro que nadie lo ha hecho.
Efectivamente, así fue, el resto de los nombres fueron rechazados y se admitió el de Liberación 2000, S.L. Tengo que añadir que, posteriormente, más sociedades pusieron el 2000 en su nombre. Incluso tengo a una empresa que recibo un montón de cartas suyas, que casualmente también tiene la razón social en San Sebastián de los Reyes, que es el mismo nombre y sólo cambia una sola letra. El problema es que, la otra sociedad tiene problemas económicos y me molestan un poco que nos confundan.
Cuando pasado algunos años, tuvimos que pensar en otro nombre de sociedad ya teníamos práctica y mi socio (que era el gracioso del grupo) juntó dos canciones “graciosillas” y creo la razón social, las canciones fueron “Asereje” y “Toma, que toma, que toma”, y le puso de coletilla el 3000 porque así era más que el 2000. Cosas que tenía el gracioso.
Cuando separamos las sociedades, hubo que separar también los nombres, yo me quedé con Liberación 2000 y mi ex con él de las canciones.
Las personas que no sabían de cómo se había creado el nombre, empezaron a pensar que lo había elegido por los siguientes motivos:
- Me había divorciado y me había liberado.
- Se habían separado las sociedades y me había liberado.
- Que se había producido un cambio en mí y era mi liberación.
La verdad es que todos los puntos eran y son correctos, pero no era tan “mala” como para describirlo tan claramente, aunque hay que tener en cuenta que, la cara es el reflejo del alma y, sin querer, se notaba que la libertad había llegado en mi vida.
Pero la realidad supera a la ficción. Vivo en esa calle y el 2000 era para quitar miedo a las terribles cosas que nos iban a pasar. Pero tengo que decir que, cada día que pasa, me siento más identificada con el nombre.
Aunque algunas veces parezca que estoy loca y me recuerdo a una famosilla de la tele que habla en tercera persona de sí misma (a mí me pasa lo mismo), hablo de Liberación 2000 como si fuera una persona que no soy yo. Pero esto es una locura pasajera -que quede claro-.
Sin lugar a dudas, Liberación 2000 representa todo lo que su momento pude imaginar de lo que quería para mi empresa y creo que es un claro reflejo de mi personalidad y ahora también el de Laura.
Y esta es la historia del nombre de la empresa. Es sencilla, pero dentro de la sencillez, sin quererlo, ha marcado la historia de mis delegaciones y la mía propia. Creo que nunca ningún nombre ha sido tan querido por nadie como yo estoy de la razón social elegida para mi empresa.
Carmen Ruiz Atienza